Santa Eulalia del Río, un pueblo singular
Santa Eulalia del Río creció alrededor de la iglesia de Puig de Missa. La ubicación del templo fortaleza permite disfrutar de unas encantadoras vistas del pueblo y su visita descubre al viajero uno de los conjuntos de la arquitectura popular ibicenca más puros y sensacionales de la isla.
Los dos mercadillos hippies de más renombre en Ibiza, Punta Arabí y Las Dalias, se encuentran a escasa distancia de nuestra Marina. Artesanía ibicenca, moda Adlib y curiosidades de todos los rincones del mundo, han convertido estos dos enclaves en los más concurridos de Ibiza.
El Hippy Market Punta Arabí, ubicado en Es Canar, junto a Cala Martina, comenzó en los años 70 y, en la actualidad, reúne más de 400 puestos en un ambiente divertido y distendido. El Mercadillo Hippy Las Dalias, ubicado en Sant Carles, es una delicia por la puesta en escena, las actuaciones en directo, la oferta para los niños y las piezas de ropa, joyería y bisutería.
No hay distancias
Los visitantes deben saber que visitar Ibiza es recorrer “todas las islas en una”. La amplísima y variada oferta de la isla, que siempre ha sorprendido a propios y extraños, se concentra en un territorio fácilmente abarcable. Por tierra, tan solo 15 km nos separan de la ciudad de Ibiza, donde podremos visitar el recinto amurallado de Dalt Vila, declarado Patrimonio de la Humanidad al considerarlo la fortaleza costera mejor conservada del Mediterráneo. El aeropuerto de Ibiza se encuentra a 22 Km de nuestro Puerto.
La magia de Formentera y Tagomago
Marina Santa Eulalia es una excelente base para visitar la isla de Formentera, conocida por méritos propios como “el último paraíso del Mediterráneo”. Para aquellos a los que les gusta desplegar las velas y disfrutar del silencio en alta mar, sus fabulosas playas son muy accesibles con vientos del Este y siempre es una excursión fantástica para pequeñas y grandes embarcaciones a motor.
Todavía más cerca se encuentra el islote de Tagomago, un lugar catalogado como Área Natural de Especial Interés (ANEI) por la gran cantidad de aves que anidan en sus peñas. Un pequeño paraíso también para las embarcaciones de recreo que fondean a menudo en sus inmediaciones.